miércoles, 11 de abril de 2018

HORÓSCOPO CHINO: EL TIGRE


Años gobernados por el Tigre:

Del 8 de febrero de 1902 al 28 de febrero de 1903
del 26 de enero de 1914 al 13 de febrero de 1915
del 13 de febrero de 1926 al 1 de febrero de 1927
del 31 de enero de 1938 al 18 de febrero de 1939
del 17 de febrero de 1950 al 5 de febrero de 1951
del 5 de febrero de 1962 al 24 de enero de 1963
del 23 de enero de 1974 al 10 de febrero de 1975
del 9 de febrero de 1986 al 28 de enero de 1987
del 28 de enero de 1998 al 15 de febrero de 1999
del 14 de febrero de 2010 al 2 de febrero de 2011
del 1 de febrero de 2022 al 21 de enero de 2023
 
Nombre chino del Signo: HU
Número de orden: Tercero
Horas regidas por el Signo: 3 am a 5 am
Dirección de este Signo: Este-Noreste
Estación principal: Invierno
Mes principal: Febrero
Corresponde al signo occidental: Acuario
Elemento fijo: Madera
Tronco: Positivo

El Tigre siempre es indisciplinado y revoltoso, muy irritable y huraño, rebelándose siempre contra sus superiores. Pertenece a la clase de los grandes revolucionarios y conductores de hombres, por su inquietud y su necesidad de cambio.

Sin embargo, no siempre es digno de confianza, pues es muy impulsivo y no reflexiona antes de lanzarse al ataque... o a una empresa. Gusta del riesgo, lo que le torna inconsciente peligro, para él y para los demás. Posee un gran magnetismo al que es difícil resistirse. Asimismo, posee autoridad congénita y natural, lo que le otorga cierto prestigio; no le gusta obedecer a los demás y, en cambio, le encanta que todo el mundo le obedezca y le preste atención permanente. La gente no le teme pero casi le venera.
 
El Tigre, cuando reflexiona o escucha los consejos ajenos puede llegar a lograr grandes victorias, pero eso no es común. Hace su camino y espera que lo sigan. Es un batallador nato, colérico y violento, pudiendo consagrarse a una causa hasta el máximo sacrificio y la muerte. Es pendenciero, tal vez mezquino y a veces egoísta, en los asuntos de poca monta; pero desinteresado en las grandes gestas y causas sociales, siempre dispuesto a capitanearlas. Es desconfiado pero siempre va en vanguardia, despreciando la autoridad establecida y a los conservadores. Siempre se inclina por la empresa de grandes riesgos y no le interesa especialmente el dinero, aunque puede llegar a amasar grandes fortunas con un poco de suerte.
 
Es persona de acción en todos los sentidos. Su destino puede ser excepcional, llegando hasta situaciones inesperadas. El Tigre, pese a todo lo dicho, es un ser emotivo y sensible en alto grado, inclinado a la meditación profunda.
 
Posee una gran capacidad para el amor, y es tremendamente apasionado, por lo que raras veces es feliz plenamente en el nivel sentimental. Su desconfianza le induce a no creer en el amor de su pareja, por lo que siempre están presentes los celos, que pueden terminar en situaciones muy violentas o irremediables. Puede correr (en el transcurso de los años) grandes aventuras, que le reportarán felicidad, dinero o ciertas satisfacciones.
 
La infancia y pubertad transcurrirán sin graves dificultades. La juventud será violenta, apasionada, con muchos problemas y conflictos que deberá resolver de la mejor manera posible, para poder llegar a la fase siguiente, donde no le faltarán obstáculos, que deberá salvar también con habilidad, ya que no sería todo lo plácida que, de otro modo, puede resultar.
 
Ya en la verdadera vejez, todo será llano y pacífico. Hay una gran diferencia si el Tigre ha nacido de día o de noche, pues en el primer caso su vida será apasionada, violenta y plagada de peligros; y en el segundo, se hallará al amparo de todas las dificultades y su existencia resultará mucho menos agitada. Si ha nacido en invierno, llevará una vida azarosa, llena de riesgos, de los que le costará mucho salir airoso y triunfante. Habiendo nacido en verano todo será más fácil y luminoso para él.
 
Es un ser con suerte, a pesar de todo, y es un signo excelente entre los chinos, puesto que significa el poder terrestre más grande y es el emblema de la protección para la existencia humana. Su presencia en el hogar ahuyenta a todas las calamidades. Pero, si en una casa hay dos tigres, uno de ellos debe desaparecer.
 
El Tigre es muy astuto, gracias a esto, siempre piensa que todos los proyectos han de salirle bien al final, aunque para ello deba combatir afanosamente, cosa que no le asusta en absoluto.
 
Este signo ha nacido con suerte y nadie tiene este don como él. Su pasión por la vida lo llevará siempre por caminos inciertos. Su orgullo no ayudará en nada, porque prefiere morir a pedir ayuda o a parecer incapaz de controlar una situación determinada. Es fundamentalmente inconforme, tratando de no ajustarse alas opiniones corrientes.
 
Sensible, emotivo y tierno no vacilará en ocultar sus sentimientos si piensa que puede controlarlos. Adora a los niños y tiene pasión por los animales. Su gran calor humano acogerá a cuantos le rodeen, pero suele ser terriblemente fastidioso con los extraños.

Sobresale por su capacidad de penetración psicológica  (también posee el don de la comunicación con los demás) hacia las personas, por lo que su intuición rara vez lo engaña; si él llega a desconfiar de alguien: créale, porque lo más probable es que tenga la razón.
 
De naturaleza volcánica, extravagante e imprevisible, su romanticismo lo llevará de cama en cama (romanticismo y sexo, significan uno solo en él), hasta conseguir a alguien que ate su sentido de la aventura con un velo de permanente excitación. Rara vez irá conforme al matrimonio. De hecho, él piensa que existe alguien más allá, más perfecto y más arriesgado, más atractivo y más codiciable. Sin embargo puede ser atrapado con mucha inteligencia y, sobre todo, paciencia... Volverá cuando se sienta solo y necesite que le cuiden y le mimen, en cada Tigre, hay un gato esperando la caricia oportuna.
 
De gran espíritu humanitario, acudirá siempre en ayuda de quienes le necesiten. Para él, parientes y amigos son lo principal.
 
Tierno y comprensivo, sabrá ser muy celoso con la persona que ama. Quiere el control de la sexualidad y no tolera coqueteos. Su territorio debe respetarse si no se quiere padecer lo terrible de sus garras. Puede hacerle mucho daño a su pareja, si ésta no comprende su sentido de lealtad y sometimiento. Deben quererle, mimarle y serle fiel, porque sino destrozará cuanto tiene a su alrededor, incluyéndole a usted.

 
 
 

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